Después de la noticia del abandono de una bebé en la Catedral, la mamá de la nena, una joven de 20 años que vive en San Martín, fue hasta la Policía a declarar sobre el caso. Tras eso la muchacha no quiso volver a la casa que comparte con sus padres. Desde ese día, la chica, que estudia en una escuela de Angaco y que es madre de otro pequeño de 4 años, está alojada (al igual que el nene) en un hogar del Estado. Al parecer existiría un problema familiar por el que no quiso reencontrarse con sus progenitores.
Viviana Meglioli, directora de la Niñez, contó que tras la declaración la madre no volvió a San Martín. No quiso regresar, y al mismo tiempo no se descarta que los padres tampoco quieran que la chica vuelva a esa vivienda. "La prioridad es revincularlas. Si acepta a la bebé de vuelta, vamos a fortalecer ese vínculo para que estén juntas. De no hacerlo, trabajaremos en la cesión de Patria Potestad y quedará para adopción", dijo Meglioli. Según los vecinos de la joven (todos pidieron reservar su identidad), la chica proviene de una familia humilde y muy trabajadora. Su papá trabaja en una finca y hace junto a su esposa macetas de barro para vender. La chica es la menor de 5 hermanos. "No sabemos qué pasaba dentro de la casa. Ella era muy callejera", dijo una de las vecinas. Otra aseguró que se notaba que la chica estaba embarazada, pero siempre trataba de ocultarlo vistiendo ropa suelta. Esto, porque se rumoreó que sus padres no sabían del embarazo y se enteraron cuando la Policía fue a buscar a la joven el sábado pasado.
