El Primer Juzgado de Familia, a cargo del Dr. Esteban de la Torre (juez subrogante), autorizó la realización de prácticas médicas sobre una menor que se encontraba en riesgo vital, frente a la negativa expresa de su progenitora la cual se oponía a las intervenciones por razones de índole religiosa.

El fallo del  magistrado aporta más detalles sobre el estado de la chiquita de 4 años. Según explica en su escrito, se trata de una  "una paciente, con alta sospecha de enfermedad oncológica, en riesgo vital  y con altísimos posibilidades de requerir transfusiones". Además, agrega que de no realizarse estas prácticas "corre riesgo de vida".

De la Torre dejó en claro el derecho  de sus progenitores (su mamá es Testigo de Jehová) a  profesar libremente las ideas religiosas,  pero afirmó la necesidad de manifestarse a "favor del derecho a la salud y la vida del menor, pues garantizar el derecho constitucional de la progenitora importaría libre y llanamente permitir a esta disponer sobre la vida de su hija (menor de cuatro años de edad), avasallando su impostergable derecho constitucional a la vida"

El juez resolvió autorizar la realización de toda práctica médica de cualquier complejidad, incluyendo transfusiones, tendiente a salvaguardar la integridad psico-física de la niña, conforme su estado clínico. Además, dispuso que se informe al juzgado sobre todas las prácticas médicas que se llevaren a cabo en referencia a la menor.