La nueva ley de reforma política, que instaló el sistema de primarias abiertas, obligatorias y simultáneas, prohíbe durante los 15 días anteriores a los comicios “la realización de todo acto de gobierno que pueda promover la captación del sufragio a favor de cualquiera de los candidatos a cargos públicos electivos nacionales”. La pena es de inhabilitación para el incumplidor.
