Evacuados, autos aplastados, animales quemados por el fuego, niños heridos por la caída de árboles, incluso una alumna fallecida porque la aplastó una palmera. Cortes de luz que duraron más de 30 horas, jornadas infernales, ráfagas que llegaron hasta los 120 km/h, y hasta la suspensión de clases. Esto es lo que se vivió en la provincia en la última década en al menos 7 oportunidades, como consecuencia del viento Zonda.

Pero no todos los casos fueron iguales. De estos 7 temporales que sucedieron en los meses de mayo, junio, julio y diciembre, el que más estragos hizo fue el del 2006, cuando se declaró la Emergencia en toda la provincia, por la cantidad de viviendas dañadas (más de 1.000) y por los evacuados (más de 50). En esa oportunidad, los climatólogos afirmaron que no había precedentes de un viento tan violento como el que se vivió ese 11 de julio. Como eran las vacaciones de invierno, no hubo que suspender las clases. El viento alcanzó 120 km/h y colapsó la electricidad, las líneas telefónicas y fincas enteras fueron arrasadas por el fuego. Unos 25 mil usuarios se quedaron sin electricidad durante al menos 24 horas.

Cuatro años después, un 23 de junio de 2010, otro Zonda hizo estragos. Con ráfagas de 95 km/h, arrancó árboles, hubo más de 35 incendios y suspendieron las clases, pero por medio día. Un árbol golpeó a tres alumnas y 10.000 usuarios sin luz. Además, ramas aplastaron a vehículos.

El otro Zonda caótico de la última década fue el del 24 de diciembre del 2012. En esa oportunidad, lo que más agobió fue hizo más de 45º C y que 15.000 familias no tuvieron luz por 3 días. Mientras que el viento que sopló anteayer, está también entre los más feroces, porque tuvo ráfagas de 90 km/h, dejó centenares de árboles en el piso y suspendieron las clases en toda la provincia durante un día y medio, mientras que en Jáchal la suspensión fue de 2 jornadas. También hubo incendios en zonas rurales y 15.000 usuarios se quedaron sin luz en un primer momento. Hasta el cierre de esta edición, la situación no se normalizaba en su totalidad.

En 2005 el Zonda más dañino sopló en mayo. El departamento más afectado fue Zonda. Se volaron techos de casas, hubo árboles caídos, se cortó la luz. Mientras que en 2008, el viento dejó 30 focos de incendios en fincas, árboles y cables caídos en Santa Lucía.

Un año más tarde, el infierno del Zonda hizo lo suyo en Angaco. Como las primeras ráfagas comenzaron a soplar pasadas las 18, no suspendieron las clases. Pero una carpa, que estaba en la ex Estación San Martín, se voló y aplastó a una mujer, que murió.