Antes fue sobre las piedras de la calle. Pero cuando el pavimento llegó a la Villa Unión, la cal que usaban antes para marcar las líneas fue reemplazada por pintura sintética. Así, en medio de la Juan José Paso, el Club Atlético Los Pumas tiene pintada su cancha en la calle, a falta de campo de juego propio. Allí juegan los chicos de inferiores y allí también entrena la Primera División, por las noches y con las lámparas del alumbrado público reemplazando a cualquier otra torre de iluminación.

El Club Los Pumas es un grito a la pasión futbolera y al esfuerzo extremo con tal de jugar. De participar con sus niños y adolescentes en campeonatos barriales, Los Pumas empezaron a competir la Liguilla de Chimbas. Luego de tres campeonatos ganados en forma consecutiva, se afiliaron a la Liga Sanjuanina y desde hace dos años juegan en la Primera B local. Como no tienen cancha oficial, alquilan la de Centenario Olímpico cuando el club debe ser local, pero los entrenamientos de los jugadores se siguen haciendo en la calle y allí juegan también las inferiores. Es más, la parte de pesas la realizan en el fondo de una casa ubicada junto a la ‘canchita de pavimento’, como le llaman los jugadores.

‘A veces nos ponemos a pensar y la verdad que es una locura pensar que sin cancha y jugando en la calle, hoy estemos en la Liga Sanjuanina y que los chicos de las inferiores estén muy cerca de empezar a disputar el campeonato de la liga infantil, con los clubes de Primera como San Martín, Desamparados o Peñarol’, contó Walter Brizuela (33), ex jugador, colaborador de club y ahora también el técnico de la Primera.

Cada noche o los domingos, cuando ponen los arcos en la calle, a una cuadra de la 25 de Mayo, los vecinos ya saben que es la hora del fútbol. Y aunque entonces no puede pasar ningún vehículo, nunca tuvieron problemas.

El esfuerzo y el tesón del club chimbero por tener su propia cancha podrá ser recompensado si avanzan las gestiones por un terreno que les ofreció la Municipalidad de Chimbas, cerca de la Costanera. ‘Si en todo este tiempo logramos mucho, ya nos animamos a soñar con una canchita cerrada y, por qué no, jugando en la Primera A local’, se ilusionó Brizuela.