En Pampa del Chañar, una pequeña localidad rural de Jáchal, los ánimos están que arden. Es que la directora de la escuela del lugar, María José Zalazar, había dicho que hay un alto ausentismo porque los chicos no tienen zapatillas para ir a clases. Y que entre los hermanitos se turnan para usar el calzado. Esto fue reproducido por DIARIO DE CUYO el domingo pasado, y ayer ya había un revuelo tan grande que el cimbronazo se hizo sentir en Casa de Gobierno, desde donde pidieron explicaciones al municipio jachallero. De este modo, desde el Ministerio de Desarrollo Humano desmintieron todo lo que dijo la directora, quien a su vez dijo que algunos padres están presionados y aseguró sufrir una "persecución política" por manifestarse siempre en contra de la minería.

Para explicar por qué una ONG estaba organizando una campaña solidaria por la escuela, la directora le había dicho a este diario que por la falta de zapatillas, los chicos van a clases sólo dos o tres días a la semana. "Es muy común que los hijos de una misma familia se turnen para ir a la escuela, al tener que compartir el único par de zapatillas más o menos en condiciones que tienen", había contado.

Eso hizo que ayer, a primera hora, hubiera una manifestación de padres y docentes enojados que decían que todo aquello es mentira, a los que se sumaron enviados de los Ministerios de Educación y de Desarrollo Humano, que coincidieron en ese veredicto. Tras reunirse en la escuela de Pampa del Chañar, cinco madres, seis docentes y cuatro funcionarios (provinciales y municipales) firmaron un acta en la que hicieron constar su bronca. Y dejaron sentadas dos aseveraciones: que una sola vez hubo un caso, hace tres años, de hermanos que se turnaban para usar el calzado e ir a clases; y que los únicos alumnos con inasistencia son los de Primero y Segundo, pero por las "reiteradas faltas de la docente a cargo", quien resulta ser, justamente, la directora Zalazar.

Por otro lado, asistentes sociales de Desarrollo Humano visitaron ayer al casi medio centenar de familias que envían chicos a aquella escuela. "En ningún caso los chicos faltan por no tener calzado ni se turnan para usarlo", aseveró el ministro Daniel Molina.

Ayer la directora no estaba en Pampa del Chañar, sino en Buenos Aires, donde cumple un tratamiento de salud. Dijo que tiene una licencia prolongada en la escuela, Y tras enterarse del revuelo causado por sus declaraciones, primero intentó poner paños fríos al decir que "a veces los docentes ponemos plata para comprarles zapatillas, porque los padres nos dicen que no los pueden mandar por falta de calzado, pero eso no se da todos los días". Pero luego hizo una acusación grave: "El problema es que a los padres les están dando planes de todos los nombres, entonces los tiene que haber apretado el municipio. Han ido en contra mío directamente. Los padres ven un billete de cien pesos, entonces salen y dicen cualquier cosa. Les tienen que haber dicho del municipio «les estamos dando un montón de planes sociales, no pueden dejar que esta mujer diga lo que dice»". Finalmente, argumentó que todo esto es algo orquestado hacia ella "porque estoy contra la minería, contra Gioja y los Kirchner".