En unas tierras en Santa Lucía de más de 7 hectáreas, un grupo de gauchos cría y cuida más de 60 caballos. El lugar tiene espacios verdes, árboles, establos separados y en el medio hay un tronco incrustado. Los ejemplares no tienen mucho contacto con los humanos y no son utilizados para tareas rurales. Tienen una vida muy serena, de hecho sólo trabajan unos pocos días al año. Cuál es su labor: tirar jinetes. Del total, sólo 24 son seleccionados para participar durante el año de domadas en fiestas folclóricas. Y en 2010 esta tropilla, de animales autóctonos de la provincia, llamada Los Gauchos, será la única de San Juan que representará a la provincia en el festival Jesús María. El año anterior participó por primera vez y salió 8va de 24, pero para este festival esperan llegar más arriba en el podio “porque los caballos han madurado y están más fuertes y además hemos incorporado 5 ejemplares nuevos”, comentó Juan Carlos Martí, dueño de la tropilla que partió ayer al evento.

Contrariamente a lo que mucha gente piensa, estos caballos criollos no llevan una vida de entrenamiento. Más bien se trata de una selección de ejemplares fuertes y se descarta los que no muestran actitudes para la jineteada. Si un caballo es muy dócil, al momento de montarlo no sirve para ninguna de las tres categorías de las domas. Pero si al animal le ponen un freno o una rienda en el hocico y corcovea, ya puede servir para las categorías Gurupa y Basto. Si el animal da vueltas laterales en el aire, sirve más para el Basto, clase en la que el gaucho usa estribos y en más difícil tirarlo. Teniendo en cuenta característica técnicas como éstas, Martí elige a los caballos más adecuados para cada tipo de montada.

Recién cuando los animales tienen 8 años participan de jineteadas, con el paso del tiempo se vuelven más fuertes y a los 12 años ya están maduros, como los que tiene Martí, para mostrar su bravura en plenitud.

Lo más importante para estos ejemplares es la alimentación. Mientras un animal esté fuerte dará montadas más espectaculares. A estos bichos les dan pasto, maíz y avena para que estén vigorosos y desde un mes antes del evento de domas más importante de la Argentina, los hacen trotar una hora por día para que estén livianos y puedan tirar a más jinetes.

El año pasado la tropilla participó por primera vez en el evento y desde hacía unos 10 años no participaban caballos sanjuaninos. Terminó 8va y fue elegida para competir por sus buenos desempeños en los distintas domas de las que participó en San Juan y en otras provincias. Para elegir a las tropillas ganadoras entre las 24 que habrá, las puntúan teniendo en cuenta cuánto duraron los jinetes sobre las bestias.

Por participar, la organización del Jesús María le da a la tropilla 3.200 pesos para el flete de los animales y 400 pesos por montada. La agrupación lleva 24 caballos y de ellos, 18 serán montados 3 veces: una vez mañana, otra el 15 y la última el 17 de enero. Pero si al final del evento la tropilla sanjuanina queda entre las primeras 6, les darán 200 pesos más por monta y se asegurarán su participación en el Jesús María 2011.