Aspecto humano

EL PILOTO. Los peritos de la Junta de Investigaciones de Accidentes de Aviación Civil (JIAAC) entrevistarán al piloto mendocino que se salvó de milagro, Rómulo Guerrini (42), para conocer su versión que, en principio, apunta a atribuir la causa del siniestro a fallas en esa nave de aeroaplicación.

EXAMEN PSICOFÍSICO. Además de la entrevista, el piloto deberá atravesar también un examen psicofísico para conocer si estaba o no en condiciones de pilotear. Esos estudios se hacen periódicamente y apuntan a saber en detalle el funcionamiento de órganos vitales como ojos, pulmones, oídos, corazón y sistema muscular y nervioso, para evitar que el piloto sufra percances en pleno vuelo.

EL REGLAMENTO. El cumplimiento de las normas de aeronavegación es otro aspecto fundamental. Se supone que Guerrini, apenas despegó de Pocito, debió avisar a la Torre de Control en Las Chacritas, 9 de Julio, su plan de vuelo, es decir avisar que salía, a dónde iba, qué iba a hacer y a qué hora volvía. Pero parece que no cumplió con ese requisito fundamental. Marisa Bellíssimo, jefa interina del Aeropuerto de Las Chacritas, aseguró ayer: “no teníamos ni idea de que ese avión estaba en vuelo hasta que escuchamos los rumores de que se había caído en un barrio y tampoco hubo comunicación del piloto durante la emergencia”.

Además investigarán por qué Guerrini sobrevolaba por la ciudad cuando no debía hacerlo por el tipo de nave que guiaba, lo que lo obligaba a hacer un rodeo por zona rurales, dijeron pilotos locales. También se recabarán testimonios.

Aspecto mecánico

EL AVIÓN. Es otro punto clave de la investigación. Los peritos analizarán cada parte de la nave para determinar varios aspectos, como su antigüedad y sus horas de vuelo, como también cada uno de sus componentes, principalmente el motor, que es la parte de la aeronave donde se concentran todas las miradas. Eso les permitirá saber si hubo fallas en la bomba de combustible o de aceite (algo que pudo quitarle presión) o si se trató de alguna falla en el timón o el sistema eléctrico. También indagarán a las personas encargadas del mantenimiento del avión.

El resultado de esa investigación será fundamental para saber si hubo o no negligencias y si es así quiénes son los responsables. La última palabra, la tendrá la Justicia.