‘Nosotros, la gente común, no tenemos idea de quiénes los estamparon en la roca ni cuándo lo hicieron, pero sí de que son patrimonio de incalculable valor, que deben respetarse y preservarse. Fuimos testigos de su destrucción‘, de esta manera, Eduardo Rivas comenzó el escrito que envió a DIARIO DE CUYO para denunciar el vandalismo contra los petroglifos del paraje Guardia Vieja, en Jáchal.

El tema no es nuevo, pero el hombre lo descubrió hace un par de semanas durante una travesía que emprendió en bicicleta junto a su esposa para recorrer la provincia.

Leyendas con aerosol, rayaduras y quebraduras son algunos de los daños que el vandalismo dejó en estos petroglifos. Pero, según Zulma Invernizzi, éste no es el primer acto vandálico contra estos restos arqueológicos que muestran imágenes de camélidos y que datan de la época precolombina.

‘El vandalismo en este lugar no es nuevo, por gente inescrupulosa que hasta ha cortado un trozo de piedra para llevarse la imagen de un guanaco. Es algo que tratamos de controlar, aunque no es una tarea fácil‘, dijo.

La funcionaria contó que junto a Teresa Michieli, directora del Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Museo Profesor Mariano Gambier, están viendo qué hacer para proteger ese patrimonio. Dijo que una de las alternativas es trasladar los petroglifos al museo, aunque sea sólo una parte de ellos.

‘Hay que tener en cuenta que estas rocas tan antiguas suelen romperse cuando se las mueve, por eso primero hay que analizar si se las puede mover o no antes de intentarlo y cuál de ellas puede soportar el traslado‘, explicó Invernizzi.