A.V.T., madre de la criatura que murió en Pocito

La madre de la nena de 3 años que falleció tras caer a un fuentón con agua caliente en Pocito dijo entre lágrimas que es "inocente" y que tiene la "conciencia tranquila". "Estoy con la conciencia muy tranquila gracias a Dios", fueron puntualmente las palabras que A.V.T. (35) expresó en una nota exclusiva con este diario.

La mujer se quebró al recordar la dramática desgracia y admitió que "tengo mucho dolor encima", sin querer entrar en detalles sobre cómo ocurrió el hecho.

La tragedia generó todo tipo de comentarios en las redes sociales, la mayoría de ellos apuntando contra ella. Es que en un principio no la llevó al hospital, supuestamente por miedo a contagiarse coronavirus.

"No tengo cabeza para nada, para mí que digan lo que quieran. Sinceramente no vivo de los demás, yo sé lo que ha pasado con mi hija. No sé qué habrán dicho y qué no habrán dicho, pero sinceramente lo dejo ahí. Yo sé que me he portado bien con mi hija y Dios sabe lo que ha pasado", sostuvo al respecto.

Insistió en que "solamente Dios me puede juzgar y yo sé que con mi hija me he portado bien. Yo estoy con la conciencia tranquila y no se lo tengo que aclarar a nadie más que a Dios".

La desgracia ocurrió durante la tarde del último martes, en una casa del Barrio Bella Vista II. A.V.T tiene 7 hijos, el menor un bebito de apenas 2 semanas y el mayor un varón de 16 años. Según fuentes policiales, la mujer había preparado un fuentón con agua para bañar a sus hijos más pequeños y en un momento fue a buscar agua fría porque estaba muy caliente.

En ese descuido, la criatura de 3 años, jugando, cayó al fuentón y se quemó la parte inferior del cuerpo (glúteos y ambas piernas).

¿Por qué no solicitaron asistencia médica? "Mi hija no llevó a mi nieta por miedo a un contagio por coronavirus, no es que no la quiso llevar", explicó la abuela de la nena en una nota con Radio Sarmiento.

Además afirmó que a la pequeña la veían bien, lúcida, que esa noche tomó yogur, agua y 7 Up, por lo que jamás consideraron que todo podía terminar de la peor manera. El cuadro de la nena se complicó por la madrugada. Fue un hermanito de ella el que advirtió que estaba descompuesta y que había vomitado. De inmediato dio aviso a su madre. 

"Ni la Policía ni la ambulancia aparecieron cuando llamamos por teléfono. Esperamos varios minutos, entre 15 y 30, y no llegaron", se quejó la abuela. Un hijo de ella sacó su auto y la llevaron hasta el hospital departamental, el Federico Cantoni. "En el camino le hablábamos, la movíamos, pero bueno, ya no respondía. No sé si ya iba sin vida", sostuvo.

"En la historia clínica quedó registrado que la nena ingresó a las 6.30 de este jueves al hospital y ya no tenía signos vitales. De todas maneras, se le realizaron maniobras de reanimación y lamentablemente no fueron positivas", explicó Ivana Videla, directora del hospital pocitano. Y detalló que tenía quemaduras en gran parte del cuerpo, "más precisamente en un 50% aproximadamente de su superficie corporal, lo que es una causa considerable para que haya perdido la vida".