La pendiente de 40 grados no parecía un obstáculo tan complejo, pero una vez que las camionetas empezaron a ascender y a los conductores se les perdió el horizonte, empezaron los problemas. Que el embrague, que mantener las 2.000 vueltas de revoluciones en el motor, que no acelerar demasiado por la relación peso-potencia, que esperar el tirón de la tracción. Los consejos de los instructores se sucedían a medida que los conductores manejaban, mientras que de paso aumentaban la dificultad de las maniobras: por ejemplo, hicieron que frenaran los vehículos justo en el bordo de la cima o que descendieran en reversa, para luego volver a subir. Fue ayer, en un curso de manejo en condiciones extremas de terreno que por primera vez realizaron efectivos de varias divisiones de la Policía de San Juan, a bordo de camionetas 4×4 y en la zona del dique de Ullum.
Una treintena de policías de la División Criminalística, del Comando Radioeléctrico, Bomberos y de Tránsito tomaron parte de la capacitación, a cargo de una empresa especializada que suele trabajar con empleados de emprendimientos mineros. Según informó Ariel Rothis, jefe de Criminalística, es la primera vez que realizan este tipo de acciones, ya que habitualmente sólo las hace el Geras. “Estas divisiones de la Policía generalmente nos encontramos con rescates o intervenciones en lugares agrestes, a veces de muy difícil acceso. Por eso es una capacitación muy importante. Además, porque la Fuerza cada vez va incorporando nuevas movilidades todo terreno”, dijo Rothis.
Los policías ayer salían en los vehículos asignados y encaraban una trepada alta y de pendiente pronunciada, sobre terreno irregular. Luego, debían frenar en lo alto y posteriormente iniciar un descenso controlado, para luego enfrentar otra pendiente. En pleno ascenso, debían detenerse y descender después en reversa. Luego, volvían a subir y rodeaban un monte, antes de volver a bajar, en una curva.
Si bien hubo camionetas 4×4 aportadas para la empresa que brindó la capacitación, también intervinieron la espectacular Ford F100 del Plan Nacional de Manejo del Fuego y la conocida Morguera, de Criminalística, ya que parte de la capacitación no sólo incluyó habilidades de manejo, sino también evaluación de riesgos que presentan los terrenos y el conocimiento de las prestaciones de los vehículos.