“Esto es una maravilla, una envidia”. Esas fueron las palabras que encontró el intendente de la IV Región chilena, Ricardo Cifuentes, para describir el impacto que le generó el Centro Cívico en una improvisada recorrida que hizo por el edificio invitado por José Luis Gioja. Orgulloso por mostrar una de las grandes obras de su gestión, el gobernador se tomó una pequeña licencia y se puso al frente del grupo de la comitiva como guía.

“Esta es una pintura del cruce, tenés que hacerlo alguna vez”, le dijo el anfitrión a Cifuentes cuando ingresaron a la lujosa Sala Cruce de los Andes, reservada para exclusivos eventos oficiales en el gigante de calle Las Heras. Ahí nomás, la responsable de la Panificación en la IV Región, Raquel Oyarzum, dijo admirada en dirección a Gioja: “me vendría a trabajar con vos, me encanta”. Desató risas en la comitiva y el gobernador tomó el guante: “cuando quieras venís, te espero” le dijo.

Distendidos, a las risas y entre chistes, sanjuaninos y chilenos recorrieron los rincones del Centro Cívico mientras Gioja explicaba cada detalle. Y hasta relató la interminable historia de idas y vueltas que tuvo el edificio, hasta que llegó a convertirse en el más moderno de la provincia. De paso, una rápida visita a Rentas, la última repartición que se mudó desde el 9 de Julio.

El remate vino en el auditorio Eloy Camus. “Largá nomás”, dijo Gioja y empezó la proyección en las pantallas gigantes. Les mostró el video que hizo correr las lágrimas en la inauguración del edificio, el año pasado.