Parecen estar pintadas mientras permanecen inmóviles, hasta que hacen algún movimiento, siempre pausado y con estilo. Mueven su cuello con delicadeza, miran todo desde arriba. Y no dan importancia a los observadores, a pesar de que pasan varios minutos contemplándolas y hablando de ellas. Son las llamas que, detrás del alambrado y la tranquera y sin darse cuenta, atraen más atención que las mismísimas promotoras, en la Exposición y Feria Temática de la Fiesta del Sol.

En un espacio que parece sacado del medio del campo y trasladado al Ferrourbanístico, se realiza la promoción del sector pecuario. Allí, en medio de plantas de cortadera y fardos de pasto, se armó el corral que ocupan los animales que conforman la "Estancia Dominguito". Hay 2 ovejas, 5 cabras de diferentes razas y, las estrellas: 5 llamas. Mientras, el espacio destinado a las vacas se mantiene vacío.

"¡Mirá, mirá, mirá!", repite una nena mientras tironea la mano de su madre. Y se detiene cerca del alambrado para observar en detalle al animal. Y es que los más sorprendidos son los niños, aunque a sus padres también les sirve el paso por el corral. Eso, porque fue colocado en medio de la expo para que la gente conozca la producción de ovinos, camélidos, caprinos y vacunos de la provincia. Por eso, frente a los animales que mascan pasto constantemente hay carteles con un detalle de sus razas y características. Y después de verlos, se puede conocer todos los productos derivados de ellos. En los stands siguientes hay ponchos sanjuaninos tejidos con lana de oveja, camperas y chalecos de cuero y piel, y quesos. Y, además, se puede percibir un triste final para las llamas que se pavonean frente al público: la parrilla, ya que hay hasta cursos de cocina para aprender a asar su carne.