El cementerio municipal de Santa Lucía empezó a construirse en 1982. La encargada de hacerlo fue la empresa Meló e Hijos, que a su vez tuvo que poner el terreno porque así lo establecía el contrato que firmó con la comuna. En el vínculo se fijó que debía construir 2.000 nichos o sepulcros individuales y 10 colectivos y que luego, el contrato terminaba.

Según un relevamiento oficial que se hizo el año pasado, hoy hay 6.798 nichos individuales y 12 colectivos. Pero en el municipio nadie sabe cuántos están ocupados y cuantos libres. Esto, dijeron ayer, porque el propietario de la empresa concesionaria se llevó toda la documentación cuando se fue de la necrópolis.

Las irregularidades que marca Fuentes vienen desde hace doce años, cuando Mut le dio la concesión. A pesar del tiempo que pasó y las gestiones municipales que tuvo el departamento de Santa Lucía, el contrato de concesión se mantuvo y no se conoce ninguna investigación previa.