“Estoy convencido que hoy por hoy, no nos damos cuenta de lo conseguido, aunque a medida que pase el tiempo será difícil que otro equipo lo repita”. “En la jugada del gol, decidí pegarle directamente con el pecho porque noté que el arquero estaba a contrapié de la jugada. Por suerte, salió bien”. “El partido fue tan duro como lo esperábamos. Estudiantes es un equipo muy ordenado y fuerte, que sale rápido en contragolpe”. “Todos sabíamos lo que representaba este torneo para el Barcelona por el tema que nunca lo había ganado. Por suerte se dio y estamos felices”. “Ahora es el momento de festejar por tanto trabajo realizado. Después de ello, no queda otra que volver a cargar fuerzas y apuntar a seguir por este camino”.