El Tribunal Electoral, antes de definir el modelo de voto, escuchó la opinión de los partidos políticos. La oposición prefería, primero, que las dos opciones aparecieran en una misma boleta y que el elector tachara o marcara la deseada. Pero finalmente quedaron en que en el cuarto oscuro habrá una por el “SI” y otra por el “NO”. La del “SI” que se oficializó no tiene acento y es un condicionante. Para expresar afirmación, debe llevar acento.