Emanuel García no tiene un santo de devoción en particular, aunque algunas veces suele visitar a la Virgen de Fátima. Ayer, cuando estuvo en San Expedito fue uno de los pocos jugadores que le prendió una vela al santo y su pedido fue más allá de lo que pase en el mundial.
‘He pedido que nos dé suerte para el campeonato a ver si lo conseguimos, pero también lo hice en lo personal pidiendo por mi bebé que va a nacer en noviembre. Mi esposa está embarazada y quiero que todo salga bien‘, expresó el delantero goleador que jugará en el Viareggio de Italia.
‘Lo acompañamos al profe Mercado, que todo esto fue una iniciativa de él‘, cerró García.
