Alertados por la exploración de uranio en La Ciénaga, un numeroso grupo de jachalleros se reunió en asamblea y decidió ponerse firme en el rechazo al proyecto que encabeza Latin Uranium. El argumento es que se trata de un área protegida y que la ley que le dio ese rango impide que en el lugar se lleven a cabo actividades que afecten los recursos naturales. Además, fueron más allá y quedaron en oponerse a todo emprendimiento para buscar el mineral en otras zonas del departamento.
Entre otras cosas, los vecinos acordaron hacer presentaciones en distintos organismos oficiales, como el Ministerio de Minería, la Secretaría de Estado de Ambiente, la Defensoría del Pueblo, el municipio y hasta llevar un petitorio a Casa de Gobierno. Anoche, enterados de la suspensión dispuesta por la administración de José Luis Gioja, tenía planeado reunirse en las próximas horas para analizar los alcances de la medida.
En el Gobierno habían hablado de fijar las coordenadas exactas de la zona protegida en La Ciénaga. Felipe Saavedra dijo anoche que en algún momento habrá que hacerlo, pero no dio fecha.