En el primer día de tregua que otorgó la presente edición del Tour de Francia, su líder, el italiano Vincenzo Nibali (foto), respondió todo con una sonrisa y, aunque reconoció que las bajas de Froome y Contador afirman sus chances no se confía.
“Temo todo”, contestó sin dudar. “La responsabilidad de la carrera a partir de ahora recae sobre nuestros hombros, pero no es algo que tememos. Anteayer con alguna ayuda de Lotto llevamos nosotros el peso. Somos un grupo muy fuerte y tengo la ventaja añadida de contar con Jakob (Fuglsang) y Michele (Scarponi)”, explicó.
Las caídas de sus rivales y la influencia que eso conllevaba en el resultado final de la carrera fue otro argumento en el que hizo varias referencias: “Es verdad que ha habido muchas caídas y lo siento por los afectados. Por desgracia las caídas son parte de nuestro trabajo. Por eso digo que estoy satisfecho con lo que he hecho hasta ahora, pero sé perfectamente que el camino hasta París es aún muy largo y lleno de dificultades”, culminó.