Ayer se realizó una nueva edición del "Maratón contra el cáncer de mama" y con una entrada en calor que duró casi una hora. Es que en esta oportunidad la consigna fue mantenerse en movimiento para fomentar la actividad física como un hábito que mejora la salud y previene enfermedades. Y hasta los niños participaron de esta consigna. Más de 5.000 personas participaron de este desafío que busca concientizar sobre esta enfermedad.

Mientras miles de personas aún seguían haciendo una fila interminable para retirar el número de inscripción y la remera, otras miles ya estaban entrando en calor frente al escenario, aunque aún faltaba casi una hora para la largada del maratón. Es que este año, los organizadores apuntaron a que los participantes se mantuvieran en movimiento hasta el inicio de la carrera.

La primera parte de esta propuesta estuvo a cargo de Karina Palacios, la instructora de fitness, que no sólo hizo que los presentes se mantuvieran en movimiento siguiendo una rutina de zumba. Con ellos hasta grabó un challenge para subir a las redes sociales de la Secretaría de Deportes. Y la propuesta divirtió a todos los presentes que, incluso los que no estaban frente al escenario, comenzaron a ensayar los movimientos que la deportista enseñó antes de dar play.

Pero la entrada en calor no terminó con este desafío. Un nuevo grupo de profesores de Educación Física subió al escenario para continuar con la consigna de no parar.

Todos tuvieron que trotar levemente en el lugar, mientras jugaban a "piedra, papel y tijera" con la persona que tenían enfrente. La prueba duró hasta que realizaron tres veces este juego, aunque el movimiento no paró. Mantuvieron el trote, levantado los brazos en forma alternada, luego le agregaron aplausos para finalizar con un grito de aliento.

Entretanto, atrás del escenario, los niños también desafiaron el sedentarismo. Los hicieron saltar la soga, saltar de aro en aro y hasta hacer el "hula-hula" para inculcarles el buen hábito de la actividad física.

Las más de 5.000 personas se ubicaron en la largada para dar comienzo al maratón que, por la cantidad de corredores, arrancó como una caminata. Los organizadores decidieron armar un cordón tomados de las manos y marchar frente a la multitud por unos cuantos metros para evitar atropellos y caídas, sobre todo porque en la carrera participaron niños en changuitos, patines y triciclos; personas en silla de ruedas, con muletas y bastones; y hasta no videntes.

Todos a correr contra el cáncer
Patricia y Alejandra participaron con todos sus hijos en el maratón.
Con un look distintivo
Patricia, Paola y Ámbar lucieron el color rosado hasta en los cabellos.
De la montaña al maratón
Sonia Flores y sus amigos se tomaron un recreo en el trekking para correr el maratón.
A correr con la mascota
Vanesa llevó hasta a la mascota de la familia, “Lalita”, a correr contra el cáncer.

Mensaje de aliento

En la previa del maratón se presentó el programa “Cartas para mi hermana” que consiste en escribirle y enviarle un mensaje anónimo a una mujer con cáncer.

Para el recuerdo

Una de las atracciones durante la previa del “Maratón contra el cáncer” fue una fotocabina
donde las mujeres hicieron fila para tomarse una foto con sus acompañantes.

Un plus de alimentos

Una fila interminable se formó frente al stand del Ministerio de Salud donde se realizó la
entrega de los maletines correspondiente al programa “Mis segundos 1.000 días”.

Maratón contra el cáncer de mama