En febrero pasado se reunieron representantes de la Asociación Rural de San Juan, de la cria de caballos peruanos, del Jockey Club, del Senasa, de la Dirección de Ganadería, de la Federación Gaucha Sanjuanina y de la Confederación Gaucha Argentina para debatir sobre qué medidas tomar para evitar la propagación de la Anemia Infecciosa Equina (AIE), una enfermedad mortal que ataca a los caballos y que es muy contagiosa. Acordaron que en todo festival gaucho o demás eventos ecuestres se iba a exigir a los jinetes que presentaran la cartilla sanitaria del animal, donde se certificara que el animal no padece la enfermedad. Se dijo que esa medida se iba a aplicar en la Cabalgata de la Fe, controlando que cada gaucho, antes de la partida, contara con el certificado de salud de su caballo. Y reiterando los controles en el Monumento al Gaucho, en Santa Lucía, y sobre el puente de Caucete. Pero la medida no se concretó.
El presidente de la Federación Gaucha Sanjuanina, Enrique Tapia, dijo ayer que era "imposible" hacer un control entre los 4.000 jinetes que participan en la cabalgata, ya que eso retrasaría mucho la marcha.
La AIE es una enfermedad provocada por un virus que se transmite de animal en animal mediante la picadura de mosquitos y tábanos, y de fácil propagación.
El veterinario Sergio Rossi, del Senasa en San Juan, dijo que registran, en promedio, 2 caballos afectados por la AIE por mes en la provincia. Y que estos datos se mantuvieron estables en los últimos años, aunque no descartan que haya más casos, ya que no se denuncian.