La pesadilla en el geriátrico Sol de Otoño comenzó el pasado 24 de agosto, cuando uno de los ancianos tuvo que ser hospitalizado de urgencia por presentar síntomas compatibles con coronavirus. El hisopado confirmó lo peor. El hombre tenía la enfermedad, por lo que desde Gobierno decidieron activar el protocolo de emergencia y considerar a los 18 residentes como casos positivos.

De manera oficial se informó que el virus ingresó al lugar por dos contactos estrechos, una visita y uno de los empleados, relacionados al brote de contagios en Caucete.

Con los testeos correspondientes, las sospechas se fueron confirmando y al ser pacientes de alto riesgo, la situación se tornó cada vez más compleja.

El 29 de agosto se produjo el primer deceso. En horas de la mañana falleció un anciano de 88 años que se encontraba internado en gravísimo estado. Al día siguiente llegó la segunda muerte como consecuencia del brote de Covid-19 en el lugar: otro varon, de 88 años.

Ayer por la mañana se sumó un nuevo fallecimiento: una mujer de 95 años que permanecía internada en el Hospital José Giordano, ubicado en Albardón. Y en horas de la tarde se apagó la vida de un abuelo de 86.

Once de los abuelos permanecen hospitalizados, mientras que tres regresaron a la residencia.

Casi la mitad de las muertes por coronavirus en la provincia, ocurrieron como consecuencia del brote en el geriátrio. Todas, en ocho días.