Apenas finalizado el encuentro de ayer en La Bombonera, los jugadores de Arsenal de Sarandí se le fueron encima al árbitro Germán Delfino, para hacerle todo tipo de reclamos. Jorge Ortíz fue uno de los más enojados, el propio jugador comentó: “Me prepoteó, me dijo que me iba a echar, fue así durante todo el partido”, contó.
“El trato que tuvimos dentro del campo de juego no fue el correcto. Hacia nosotros decía de todo, los jugadores de Boca le decían barbaridades y no los amonestaba, nos sentimos robados porque Boca necesitaba salir del último puesto”, siguió.
Para cerrar disparó con todo contra Delfino: “Este tipo se comió el personaje, dio cuatro minutos de alargue, y en lugar de jugarlos se la pasó peleando con el banco de suplentes nuestro para que pasen los minutos”.