Por Sebastián Marengo Entre los dos suman un tercio de los 26 goles de equipo. Arrancaron el torneo siendo titulares y aportándole muchas alegrías. Son dos de los jugadores más queridos por los hinchas y hoy están en el banco de suplentes. En la derrota del domingo en Tucumán ante su homónimo ingresaron en el complemento, Sebastián Penco convirtió y pasó a ser el goleador del torneo con 9 gritos y Roberval (acumula 3) fue quien lo asistió, además le aportó el cambio de ritmo y la picardía para generar espacios. Mensaje de que están a pleno para formar parte del once inicial. Ambos perdieron la titularidad hace varios juegos atrás. Penco estuvo desde el arranque en los primeros 13 partidos y en el siguiente descansó por llegar a las 5 amarillas, mientras que Roberval formó parte del equipo ideal hasta la fecha 12. Ambos volvieron a ser titulares en la jornada número 16, cuando el Verdinegro perdió de visitante por 2-0 ante Defensa y Justicia en un partido para el olvido y a partir de ahí son una constante entre los relevos. En Tucumán, los medios periodísticos locales se preguntaban cómo Penco no era titular ya que está al tope de los artilleros de la categoría, además de ser uno de los máximos goleadores del club en su historia en la B Nacional. Quizá la misma pregunta que hoy se hacen los hinchas y que la semana pasado se lo demostraron a Franco cuando en la práctica de fútbol lo puso unos minutos para los titulares y de la tribuna lo aplaudieron y alentaron. San Martín adquirió sus derechos hasta el 2014 y pese a que lo fueron a buscar clubes de México, Bolivia, el mismo Atlético Tucumán y Aldosivi, entre otros, la dirigencia no lo dejó ir y eso le molestó a Sebastián en algún momento. Según se dice en los pasillos del Hilario Sánchez habría tenido una discusión y eso le jugó en contra, pero hoy, que el equipo tiene aspiraciones de ascenso tiene entre los suplentes un hombre que no sólo ataca, sino que defiende y da una mano en todos los sectores. Penco no quiere hablar del tema, aunque sus reacciones hablan por sí solas. Hace cuatro fechas atrás ingresó, anotó y le dio el triunfo sobre Almirante Brown y en su festejo descargó toda la bronca contenida, incluso con insultos que al parecer tenían como destinatario a Franco más allá que él lo negó. En el caso de Roberval, quien tiene un temperamento fuerte, en torneos pasados tuvo problemas que lo llevaron incluso a irse del club, pero siempre retornó y aportó lo suyo. Jugador encarador, hábil, con potrero, que nunca baja los brazos y es incansable físicamente. El brasileño abusa de la jugada personal, pero cuando levanta la cabeza sabe que hacer, como sucedió el domingo, cuando tras el 2-0 del equipo tucumano Franco lo puso y en la primera que tocó asistió a Penco y éste anotó. En Tucumán San Martín perdió la posibilidad de ser puntero, porque cayó, pero Penco fue más que Caprari y Roberval que Barreiro en el mano a mano. Ahora hay una obligación que es la de ganarle el sábado a Rosario Central para no perder terreno.