El pasado viernes, el arco político y productivo de Tucumán reconoció que la Ley del Mosto ‘’dejó de ser un fantasma y pasó a ser una advertencia, un problema que afectará a la economía de Tucumán y el NOA’’, según los cálculos técnico-económicos que expusieron. La Federación Económica de Tucumán (FET) logró reunir a senadores y diputados, junto con industriales, productores y gremios locales y del país, para plantear estrategias en contra de la iniciativa.
Por ejemplo el diputado del Acuerdo Cívico Radical, José Cano, dejó de lado su color político y tildó el proyecto vitivinícola de ‘’irracional’’ y dijo que ‘’no será viable’’ en Diputados.
