�En este contexto de renovación generacional, también levantó revuelo la decisión de la Santa Sede de ‘investigar‘ a la arquidiócesis de Rosario por supuestas irregularidades económicas y denuncias contra el arzobispo José Luis Mollaghan. Auditoria que abrió una danza de nombres sobre un eventual sucesor de Mollaghan: Jorge Lugones (Lomas de Zamora) y Jorge Lozano (Gualeguaychú), los que suenan más fuerte. También integrantes de la ‘tropa bergogliana‘. Fuentes episcopales confirmaron a DyN que el mismo destino de ‘investigación‘ administrativa y pastoral, aunque se apele al eufemismo de ‘visita fraterna‘, recaerá más temprano que tarde en la diócesis bonaerense de Zárate-Campana, a cargo de Oscar Sarlinga. Mollaghan y Sarlinga no cultivaron una buena relación con Bergoglio, y en ambientes eclesiásticos aseguran que fueron fuertes los choques de ambos con el entonces purpurado en cuestiones pastorales y sociales.