Hace exactamente una semana y cuando Roberval estaba en Buenos Aires junto al plantel de San Martín, ingresaron delincuentes al departamento donde vive junto a su esposa y su hija de un año, Marcia, (su otra heredera tiene cinco años y se llama Keroly) y le robaron 7 mil pesos y otras pertenencias de valor. Incluso, la mujer del delantero forcejó con los malvivientes y debió cubrir a su hija. “No fueron los mejores días que viví”, contó el delantero.