“Hace sólo diez años, esto era absolutamente inimaginable”, dijo el paleontólogo Oscar Alcober, director del Museo de Ciencias Naturales de la UNSJ. Se refería al futuro anexo del museo, un edificio que revolucionará todo lo conocido hasta ahora en la provincia e incluso en el país.
Para ponerlo en contexto: el salto de atracción y tecnología que representó crear la muestra Titanes de Ischigualasto fue como pasar de la bici al avión, en tanto que el nuevo museo será directamente una nave espacial, pero tripulada por dinosaurios.
Su diseño, que integrará cilindros de distintas alturas, entrará en interacción con un mundo de corporizaciones, hologramas, fondos móviles a 360 grados, imágenes 3D y hasta un dino robot que simulará estar vivo. Y su ubicación, en la esquina de 25 de Mayo y España, jerarquizará el eje cultural que ya incluye los centros de Convenciones y Exposiciones, el futuro Teatro del Bicentenario y el flamante Museo de Bellas Artes Franklin Rawson, de próxima inauguración, que en sí mismo ya había implicado un salto sideral en el urbanismo sanjuanino.
El futuro edificio ya es casi un hecho. Ayer mismo, en la apertura del IV Congreso Latinoamericano de Paleontología de Vertebrados que se realiza en San Juan, el gobernador Gioja anunció que el mes que viene se llamará a licitación para la construcción. En el pliego se incluirá el proyecto hecho, calculado y aprobado íntegramente por la Dirección de Arquitectura de la provincia.
Ayer incluso se mostró una animación de cómo será el museo (disponible online en www.diariodecuyo.com.ar), con sectores de hasta tres plantas, con un gran balcón central en la planta baja, desde donde se podrá ver las corporizaciones más grandes, ubicadas en el subsuelo, con la recreación del ambiente natural de hace casi 300 millones de años, cuando estos animales caminaban por Ischigualasto.
“La idea -explicó Alcober- es que el actual museo sea la parte científica, donde la gente pueda ver los fósiles reales, y que el nuevo sea la parte lúdica, dinámica, con toda la espectacularidad de los dinosaurios”. Para eso, en marzo tendrán listo el proyecto de qué habrá adentro: además de los Titanes, fondos a 360 grados con imágenes móviles, figuras holográficas y juegos interactivos, similares a lo que ya pudieron mostrar con los dinos en Buenos Aires y en Japón.
Y a eso se sumará un dinosaurio robotizado, que por ahora está en etapa de prototipo.
Además, el edificio tendrá confitería, restorán, estacionamiento y jardines amplios que se conectarán con los del actual museo, ubicado en la ex estación Belgrano. El proyecto aprobado por Arquitectura implica también demoler un pequeño galpón que se le anexó a la estación como depósito, además de la actual casa roja donde funciona el Mercado Artesanal Tradicional.
Según fuentes vinculadas al proyecto, el costo de la obra rondará los 50 millones de pesos, que serán financiados por la Provincia. Pero todavía no hay un cálculo de cuánto costará la tecnología que convertirá a su interior en un atractivo turístico y científico mundial.

