Revista Oh! entrevistó a las directoras de Studio Uno, y ellas aconsejan:

¿Cuáles son las cualidades de un chico o una chica que desea empezar a estudiar danza?

Alejandra: Si hablamos de condiciones físicas, no se necesita ninguna en particular para comenzar los estudios de danza, prefiero un alumno con voluntad que alguien que desborde de aptitudes físicas. Hoy la técnica clásica ha adoptado diferentes técnicas que ayudan a un estudiante a crecer rápidamente y a optimizar la energía del cuerpo y los resultados sin duda son más rápidos que hace algunos años. Como todo, la danza clásica no ha perdido su esencia pero va adaptándose a los tiempos de hoy.

Celina: En realidad no sé si llamarla cualidades, por que lo más importante es que lo desees y te guste. Puedes tener condiciones físicas (que te facilitarían la tarea) pero no son excluyentes. Debes saber que la danza es un arte y como tal tiene su disciplina que hay que seguirla para conseguir frutos. Dedicación, paciencia y constancia son las “cualidades “necesarias para conseguir logros en la danza.

¿Qué falta en nuestra provincia para trascender puertas?

Alejandra: Creo que más allá del gusto de bailar que luego se va transformando en pasión ,es necesario darles a los jóvenes el plafón para poder hacer de este arte una profesión y no tener que emigrar de la provincia, como ha pasado con tantos valores, poder darles la opción de elegir el lugar donde realizarla. Por eso hoy en día existe la necesidad urgente de crear una compañía o un ballet provincial. Es el paso que falta para completarnos como una provincia que culturalmente está creciendo a pasos acelerados.

Celina: Con lo que respecta a la danza, aquí en San Juan todo nos cuesta mucho. La danza está un poco relegada. Hemos presentado muchos proyectos para hacer crecer el nivel, para crear un ballet, para que la danza llegue a todo el mundo, y siempre la misma respuesta, no hay presupuesto, y sin la ayuda oficial o estatal, la parte privada solamente no alcanza.

Alejandra y Celina son bailarina desde pequeñas. ¿Podrían dar un consejo para los que estudian este arte?

Alejandra: A través de mi experiencia he comprobado que un niño que estudia arte, es una persona más sensible, despierta y sin duda va creciendo con grandes valores. En una escuela de danza, no sólo se enseña a bailar, se educa en una forma de vida que marca el futuro, siempre digo que los chicos más ocupados son los que mejor distribuyen y disfrutan el tiempo. Si tuviese que dar un consejo, creo que la danza es el complemento ideal para la formación mental, física y emocional de una persona.

Celina: La danza como cualquier otra representación del arte se lleva en el alma, en el corazón, y es desde el alma y el corazón que uno lo siente y lo expresa. La vocación en el arte es fundamental, pues se necesita de ella para avanzar. La danza es hermosa, es luz, es una disciplina dura y exigente que requiere de tiempo y esfuerzo pero al final de la jornada o del camino te embriaga de felicidad.

Logros y más logros, les queda algún sueño por cumplir

Alejandra: Siempre sigo soñando, es parte de mi esencia y de lo que me dio esto que amo.

Los sueños nunca concluyen, siempre comienzan, sobre todo

cuando veo cada año esas niñas tan pequeñas y sus madres más ansiosas por cumplir ese sueño de bailar.

Ver que los alumnos cumplen una etapa cuando egresan y también disfruto de los logros de los que pasaron por el estudio y hoy son profesionales.

Siento que no somos una especie en extinción por que todavía pedimos e impartimos disciplina en una sociedad tan difícil, donde hoy se quiere todo rápido y fácil, ver que todavía nos eligen me hace muy feliz.

Mi gran sueño es poder seguir haciendo esto con la misma pasión.

Celina: Siempre hay más expectativas y sueños. Agrandar el estudio para mayor comodidad del alumnado es algo en lo que estamos trabajando. La creación de un ballet para la provincia, para que nuestros valores (que son muchos) no tengan que irse es un anhelo que seguiremos intentando.