En 1981, Palito Ortega logró traer al país al gran Frank Sinatra. El recital fue en el Luna Park y ante 20 mil personas. El cantante neoyorkino quedó fascinado con el asado, el vino y aseguró que fue uno de los mejores shows en mucho tiempo. Sin embargo la instabilidad de la economía argentina en esa época hizo que el tucumano quebrara. "El dólar estaba a $2,20 cuando lo contraté pero cuando llegó la fecha estaba a $7,80. Yo no tenía forma de rehacerme. Pagué todo lo que tenía que pagar, vendiendo todo lo que tenía que vender", contó en una entrevista tiempo después Palito. Pero también reveló que Sinatra le había prometido ayudarlo cuando quisiera y así partió a Miami con su familia. "En cinco años recuperé con creces todo lo que había perdido", recordó.