Jonathan Artura “reveló” en la previa al cruce con River que siempre cuando jugó en las inferiores de Boca (de la Octava a la Reserva) jamás había perdido. El enganche tuvo anoche su primera vez y encima lo hizo viniendo desde el banco, cuando en los primeros dos encuentros había sido titular en Sportivo. Otro que vivió una tarde “distinta” pero en este caso al revés, fue el arquero Matías Giordano quien desde pibe fue fanático de la Banda e incluso de ir a alentarlo en la popular del Monumental. “Uno quería ganar porque es profesional. Estoy triste porque no se pudo. Lo de hincha de River uno lo deja de lado cuanto entra a la cancha con la camiseta de Desamparados. Me voy triste porque pienso que pudimos haber estado cerca del empate”, contó el uno quien no tuvo una gran actuación como en el juego pasado frente a Chacarita.
