Es un fuera de serie. Un delantero pura potencia, con pique, entrega, la aguanta, va bien arriba y no se cansa nunca de apretar la salida rival. Y encima de todo eso: hace goles. Sebastián Penco estuvo presente en los tres juegos claves que tenía en cadena el verdinegro, donde San Martín ganó los tres y en donde el delantero marcó en cada uno de ellos. Fueron tres gritos, con la particularidad que ninguno tuvo el mismo orden, pero que sirvieron para ganar y para pasar a ser el máximo goleador del equipo con seis. Es que ya traía tres y ante Instituto marcó el segundo de la noche, en Florencio Varela ante Defensa fue el que abrió el triunfo y ayer fue el tercero y que cerró la goleada. Todos de enorme faena, todos que contribuyeron para ganar. Porque la triple parada era la prueba de fuego para saber cómo estaba San Martín y las sorteó con fútbol, estrategia y goles. Y en todo ello siempre estuvo latente la figura de Penco, quien con el pasar de los encuentros ya se mete en el corazón del hincha. Sino basta con ver como los ovacionaron cuando anoche, a los 27´ del complemento fue reemplazado por otro goleador de raza como Tonelotto.