Pese a su dolor de madre, dijo que ya no tiene otra salida. La mujer pide que le saquen a su hijo de la casa y lo dejen internado en alguna institución pues la convivencia se les hizo insostenible. Es que según la mamá, su hijo adolescente de 16 años con problemas psiquiátricos tiene episodios de agresividad que terminan con la mujer, el marido y los hermanos más chicos (tres nenas de 11, 8 y 7 y un niño de 1 año) golpeados, además de que descarga su ira rompiendo muebles y pateando cosas. Tras su última crisis, el martes pasado, fue llevado al Hospital Marcial Quiroga, pero la mujer solicita ayuda para que de ese centro de salud sea derivado a una entidad que pueda cuidarlo y contenerlo. La mamá (se preserva su nombre para resguardar la identidad del menor) contó que su hijo empezó con problemas a los 5 años. Entonces lo trató y medicó, pero a medida que el chico (fruto de una relación con una expareja) fue creciendo la situación se complicó por su agresividad.
‘Cuando le agarran los ataques nos pega a todos, hasta a mi marido que es el único que lo puede controlar. La otra vez rompió la cucheta y con uno de los caños nos quiso golpear, además grita y patea todo. Mis niñas le tienen terror y salen corriendo a esconderse, llorando’, contó la mujer.
‘Tenemos miedo también a que les haga algo malo a mis hijas cuando están acostadas o solas. Es que antes no lo hacía, pero ahora se masturba o se desnuda delante de ellas o mío’, agregó.
El chico también tuvo problemas en la escuela y por eso fue hasta 4to grado. ‘Golpeaba a las maestras y a los compañeros y cuando lo sacaron, ninguna otra escuela me lo quiso recibir. También estuvo internado en el Lazos (un centro educativo terapéutico), pero lo expulsaron por lo mismo’, relató la mamá.
El martes pasado, tras una nueva crisis, tuvo que intervenir la Policía y al menor lo llevaron al Marcial Quiroga. Un informe psiquiátrico de ese hospital indica que padece retraso mental moderado, con síntomas psicóticos, episodios de fuerte impulsividad y conductas hetero-agresivas (violencia hacia otros) y sugiere que sea internado en una institución que permita su rehabilitación y reinserción social. ‘Es muy doloroso para mí decir esto, pero en el hospital lo van a tener unos días y me lo van a dar de vuelta; pero yo no quiero eso porque vamos a seguir con los mismos problemas. Necesito que nos ayuden; a mí, a él y a mi familia porque no es vida la que llevamos. Mi hijo necesita una oportunidad para mejorarse’, expresó la mujer.
Desde Salud Mental del Ministerio de Salud Pública indicaron que en San Juan no existe una entidad que pueda alojar a pacientes infanto-juveniles, a la vez que el Hospital Mental de Zonda no puede internar a menores de edad, por ley. En tanto que la Dirección de Discapacidad estudia el caso y empezó a asesorar a la familia, por lo que no descartan pedir la intervención también de la Justicia.