Tras las versiones encontradas entre el director del Hospital Marcial Quiroga, Enzo González Iaiza e Isabel Pinkas, la mujer que sepultó un cadáver que no era el de su marido, ayer salió un nuevo dato a la luz. Según altas fuentes policiales, el cuerpo que fue exhumado el miércoles pasado, estaba desnudo. Esta versión coincide con la de la viuda que aseguró que ella reconoció a su esposo, Claudio Amar, luego le dieron el cajón cerrado y no lo vistió ni lo veló . Lo dijo para desmentir la versión que Iaiza lanzó en conferencia de prensa el miércoles pasado y que apuntó directamente contra la mujer, responsabilizándola de la equivocación en la morgue a la hora de identificar el cuerpo de su marido.

Todo esto se dio a conocer ayer, día en que se notificó a Pinkas y a la familia de Américo Manzur, el hombre que fue sepultado por error, que ya podían retirar los cuerpos de la morgue judicial, según dijeron desde la Seccional 13ra. El hijo de Manzur, Carlos Wilson Manzur, llegó al lugar a primera hora de la mañana y se llevó a su padre, que luego fue sepultado en el Cementerio San Miguel. Desde la Seccional confirmaron que, al cierre de esta edición, no sucedió lo mismo con el otro fallecido.

Altas fuentes policiales indicaron que la viuda de Amar llegó a la comisaría ayer por la mañana, acompañada de abogados, y luego fue al Marcial Quiroga, también con los letrados. Lo que no trascendió fue por qué la mujer no retiró el cuerpo de su marido. Pinkas dijo a Diario de Cuyo que no volverá a realizar declaraciones. Mientras que este medio intentó comunicarse con Iaiza, pero no respondió a los llamados. Por su lado, la Policía ya entregó todas las pruebas identificatorias al Quinto Juzgado Correccional que entiende la causa. La Justicia sigue investigando si el cambio de cadáveres fue un error involuntario o un delito. Si sólo fue una equivocación producida en la morgue, el juez Matías Parrón dijo que el Hospital deberá investigar y sancionar al responsable.

Fue el martes cuando salió a la luz que una mujer había sepultado al hombre equivocado. Es que, el viernes pasado, en ese centro de salud, murieron dos varones, que luego fueron llevados a la morgue. El sábado fue retirado el cuerpo de Amar, mientras que el de Manzur quedó quedó a la espera de que algún familiar se hiciera cargo. El conflicto comenzó cuando, el lunes, según Iaiza, el encargado de la morgue detectó que habían entregado el cadáver equivocado. Ni bien esto se hizo público, el director salió a decir que “Pinkas reconoció a su esposo. Luego le pidió a la gente de la morgue que le dieran tiempo para ir a buscar ropa para vestir a su marido. Media hora después volvió al hospital. La señora vistió a su difunto esposo adentro de la morgue del hospital, con ayuda del camillero. Una vez que lo vistió, lo pusieron dentro del cajón y lo cerraron. Luego le tomaron los datos correspondientes de la empresa funeraria y de la persona que se lo llevó”. Ante estos dichos, la mujer salió a decir que Iaiza era un “reverendo hijo de p…”, y que ella nunca vistió a su marido, porque le dieron el cajón cerrado.