No dio tregua durante todo el fin de semana y la noche del lunes. La lluvia que rompió la media histórica de precipitaciones en junio dejó graves problemas en la provincia y hasta ayer había más de 4.000 personas afectadas en San Juan, con viviendas que no aguantaron tanta agua y humedad. Es más, hubo 88 familias autoevacuadas y evacuadas, escuelas que no dieron clases porque no tienen infraestructura adecuada para paliar el frío, rutas con problemas e incluso las lluvias influyeron para que se desbordaran las cloacas en Santa Lucía. Si bien el fenómeno golpeó en todos los departamentos, el más dañado fue Jáchal, en el que hubo hasta derrumbes parciales en 15 casas.

El titular de Emergencia Social del Ministerio de Desarrollo Humano, Lucio González, indicó que durante el fin de semana asistieron a más de 4.000 personas en la provincia y al cierre de esta edición no descartaba que se sumaran más casos, pues desplegaron equipos de asistencia en los 19 departamentos.

Hasta ayer había 88 familias que tuvieron que dejar sus casas por el mal estado de sus viviendas en distintas zonas del Gran San Juan y departamentos alejados. De ellas, 84 se autoevacuaron o fueron llevadas a casas de familiares, mientras que cuatro grupos familiares fueron trasladados a lugares públicos. Tres eran de Jáchal, refugiados en el hospital San Roque, en el CIC de San José y en el CIC de Huaco; y una familia fue movilizada hasta una unión vecinal en Casuarinas, en 25 de Mayo.

‘Sólo desde el Ministerio de Desarrollo Humano realizamos 800 intervenciones. Los equipos de Acción Social de los departamentos realizaron sus propios operativos porque desde hace un tiempo que descentralizamos la asistencia. Las ayudas han sido variadas, desde nylon y palos hasta mercadería. A medida que se fueron presentando las situaciones, fuimos actuando’, expresó Lucio González.

Todos los departamentos sufrieron los problemas de la lluvia, pero los más afectados fueron los del Norte.

En Iglesia, además fue muy importante la nevada y entre las localidades más afectadas estuvo Bella Vista, con 32 asistencias y, hasta ayer, dos familias autoevacuadas, informaron desde Desarrollo Humano. De todos modos, las autoridades informaron que Jáchal se llevó la peor parte.

DESOLADOR:

Hasta ayer, las autoridades no daban abasto para atender todas las necesidades en Jáchal. Hubo cientos de personas afectadas por problemas en sus viviendas y 61 familias directamente debieron dejarlas porque se tornaron inhabitables, por lo que fueron llevadas a familiares, vecinos o allegados e incluso al hospital y centros comunitarios. De ellas, según un relevamiento del área de Acción Social de la Municipalidad de Jáchal, unas 15 casas sufrieron derrumbes parciales de techos o paredes. A su vez, al menos 50 pozos negros cedieron ante tanta humedad en distintas localidades.

En tanto, por el mal estado de las calles hubo puestos alejados en los que no pudieron llegar por vía terrestre, por lo que ayer recurrieron a un helicóptero para tratar de llegar a Los Coloraditos, Carrizal del Alto, La Isla, Los Pajaritos y Carrizal del Bajo, en la zona Noroeste, donde incluso estaba todo nevado; y La Aguadita, en Niquivil. ‘Los puesteros de cabras están aislados y muy complicados porque el último informe que pudimos conseguir nos decía que no tenían ni leña seca para calefaccionarse. Además, murieron todos los animales que criaban, debido a la cantidad de nieve’, dijo Eugenia Godoy, a cargo de Acción Social de la municipalidad.