El robo y la violencia contra los abuelos en sus propias casas “es un tema que nos preocupa bastante”, aseguró el secretario de Seguridad, Ángel Riera. En 3 meses (teniendo en cuenta el lapso entre el 15 de mayo y el 15 de agosto pasados), 9 ancianos sufrieron golpes e incluso fueron atados en sus casas por personas que les robaron. Debido a eso, las autoridades pidieron aumentar el patrullaje en las zonas conflictivas y, además, ofrecen recomendaciones para que los abuelos puedan cuidarse (ver aparte).

Los casos de este tipo no eran tan comunes. Según los archivos de este diario, desde agosto de 2012 hasta el 15 de mayo pasado, cuando comenzó la ola de robos (que suman 8), sólo se habían registrado 2 hechos.

El primero de los delitos con estas características en los últimos 3 meses se llevó a cabo en Angaco, donde se registraron 3 casos en menos de 2 meses. El perjudicado fue Francisco Olivera (74), quien estaba con su hijo. Ambos fueron golpeados con ladrillos y puntapiés en su casa de Costa de Vargas. Les robaron una moto y 2.000 pesos. También en ese departamento, pero en Punta del Mogote, el 24 del mismo mes, desconocidos atacaron a golpes a las hermanas Rita (65) y Francisca Soto (68). No alcanzaron a robarles. Mientras que, el 17 de julio, dos encapuchados golpearon y maniataron a Margarito Jofré (80), otro angaquero. Los ladrones lo dejaron tirado, ensangrentado y tapado con una manta. Escaparon con 7.000 pesos y otras pertenencias del jubilado.

Quien se convirtió en víctima el 17 de junio pasado, fue Manuel Sánchez (89). Tres delincuentes lo sorprendieron en su casa, justo enfrente del municipio de Caucete. Los ladrones lo llevaron a su pieza, lo golpearon, lo ataron y después revisaron la casa, pero no sustrajeron nada importante. Su mala suerte continuó. Cuatro días después, los delincuentes esperaron que se durmiera, volvieron a entrar a su casa, le cubrieron la cabeza, lo ataron y le pegaron trompadas y puntapiés. Le robaron 1.900 pesos y 2 armas, entre otras cosas.

El 29 de junio, la violencia se trasladó a Capital. Carlos Massini (69) recibió 12 puntazos tras haber sido sorprendido mientras dormía con su esposa. Los dos ladrones que lo atacaron entraron por la ventana de su departamento, que no tiene rejas y estaba abierta. El hombre sufrió heridas en la cara y en una pierna. Les robaron joyas, un reloj, un celular y 200 pesos.

En lo que va del mes ya se registraron 2 casos en los que fueron 3 las abuelas lastimadas. El pasado 6 se desarrolló el primero, en Chimbas. A Elizabeth Vega (77) le pegaron trompadas hasta provocarle un corte en la frente y otro en una oreja. Lo único que le sacaron fue 50 pesos y un reloj, pero la dejaron internada. Sólo 4 días después se registró un caso similar en Santa Lucía. Emilia (77) y María Marti (82) fueron sorprendidas a punta de pistola, amordazadas y encerradas en el baño. Allí pasaron casi 24 horas, las rescató la Policía. Les robaron dinero, artefactos y un auto.

LAS MEDIDAS:

Al respecto, Riera comentó que “hemos advertido el aumento de robos a ancianos. En muchas oportunidades entran a las casas y se conforman con la sustracción, pero en otros hay mucha violencia. Creemos que son personas que están alienadas, que no están en sus cabales y, al advertir la debilidad de los ancianos, sienten más ganas de golpearlos”. Y agregó que “ya incrementamos el patrullaje en las zonas complicadas. No puede haber un patrullero permanentemente en cada lugar, pero sí tenemos que realizar una acción disuasiva, es decir, que los delincuentes sepan que hay control”.