Los productos Cinzano llegaron en 1877 representados en Argentina por el importador Francisco Rosi. La firma ingresa al país en 1910 y se instala en San Juan en 1923 comprando los italianos la bodega llamada “La Asturiana”, ubicada en Desamparados y que pertenecía a la sociedad Rogelio Fernández y Compañía. A la nueva bodega se la llamó “Establecimiento Vitivinícola Santa Victoria”. La idea de la firma era producir vermouth para abastecer a la numerosa colonia de italianos en Argentina. Se estima que influyó mucho la decisión de invertir en San Juan la amistad de los Graffigna con los Cinzano.