La coalición oficialista chilena, confusa y desorientada tras su derrota electoral del domingo, se enzarzó ayer en disputas internas luego de que los miembros más jóvenes exigieron la renuncia de los dirigentes. Varias decenas de jóvenes ocuparon la sede de la Democracia Cristiana para exigir la renuncia de sus dirigentes, mientras en la sede del Partido Socialista miembros de esa colectividad intentaron encadenarse a la puerta, situación que finalmente terminó con varios enfrentamientos a golpes. Dirigentes demócratas y socialistas exigieron la dimisión de Juan Carlos Latorre y del senador Camilo Escalona a la presidencia de ambas colectividades. “Si Latorre no viene, asume sus errores y pone su cargo a disposición, esta toma sigue. Estamos esperando su reacción, pero este caballero ni siquiera ha llamado”, dijo a radio Cooperativa Héctor Gárate, presidente de la Juventud Democristiana, uno de los ocupantes de la sede del partido, en el centro de Santiago. Por su parte, Patricio Mery, de la juventud socialista, comentó que con este tipo de actos “nacerá la nueva Concertación”.