Las frenadas de golpe ya no alarman a los vecinos del Barrio Illia, en Rivadavia. Es que desde hace casi un mes conviven con grandes pozos en la calle de entrada del vecindario. Según ellos, ya hicieron varios reclamos, pero nadie arregla la calle. Es más, en la última semana debieron socorrer a tres motociclistas que se accidentaron por culpa de estas roturas del pavimento que a simple vista parecen insignificantes.
“Ya llamamos en varias oportunidades a la Municipalidad pero no vienen a arreglar la calle”, dijo Gemma, una de las vecinas que vive por calle Colón justo a la altura de los pozos.
Por esta situación contó que ella misma se encargó de tapar con tierra las roturas del pavimento porque hubo tres personas que perdieron el control de la moto por pisar los pozos y se accidentaron.
El último accidente ocurrió el jueves pasado. Cerca de las 22, un repartidor de un almacén pisó con su motocarga el pozo y se fue contra un árbol de la plazoleta. El hombre debió ser socorrido por los vecinos que se mostraron indignados ya que hace varios días reclaman los arreglos.