El caso del bebé de 2 meses que supuestamente fue maltratado por su niñera pone en alerta a los papás. Desde la Subsecretaría de Trabajo explicaron que el servicio de personas que cuidan niños está legislado y, por lo tanto, los padres tienen el derecho de pedir el examen psicofísico a quien hayan elegido para que cuide a sus hijos, acción que sugieren como una forma de tomar precaución. Además, proponen solicitar el certificado de antecedentes y recomendaciones de otros empleadores que hayan contratado a la persona.
"La Ley de Trabajo para Personal de Casas Particulares contempla la tarea de las niñeras. Por ello, así como el empleador tiene la obligación de pagar seguro de riesgo de trabajo, el salario contemplado en la reglamentación y el resto de los requisitos, también tiene el derecho de tomar recaudos a la hora de contratar a la persona", dijo el subsecretario de Trabajo, Roberto Correa Esbry. Y agregó que "entre otras cosas se debe solicitar un certificado antecedentes, datos y recomendaciones de otras personas que hayan contratado a la niñera e incluso es aconsejable solicitar un examen psicofísico. Ese es un modo de tomar recaudos y tener datos concretos sobre la persona elegida para la tarea".
A su vez, además de la realización de estos exámenes, la coordinadora del Comité de Maltrato Infanto Juvenil del Hospital Rawson, Silvia Pugliese, aconsejó que "es importante que los papás se tomen un tiempo para conocer a la persona antes de contratarla. Para eso se puede hacer una entrevista para conocer su carácter y su modo de trabajo".
LA CLAVE: PRESTAR ATENCIÓN
En cuanto a lo que los padres deben tener en cuenta para controlar que sus hijos estén bien cuidados y no sufran maltratos, Pugliese dijo que, más allá de observar que no haya marcas en el cuerpo de los niños, es importante estar atentos y mantener una buena comunicación con los chicos. "Muchos papás no están atentos a la conducta de sus hijos. Si un niño comienza a tener regresiones a situaciones que había superado, como volver a orinarse en la cama, es porque algo pasa. Otra señal es que el niño comience a tener pesadillas, esté asustado, triste o retraído", enumeró Pugliese. Y agregó que "hay que tener en cuenta que a veces los chicos no hablan por temor a represalias, por eso es bueno que sus padres se comuniquen con ellos y les digan que si alguien les grita o les pega deben contárselos".
En cuanto al control del trabajo de la niñera y su relación con el niño, Pugliese dijo que una de las medidas es observar si el niño sale a recibir a quien lo cuida o se esconde cuando llega. También se puede ver si juega con ella o trata de alejarse. "Nunca está de más regresar a casa a un horario inesperado y ver qué está haciendo el chico", aseguró.