Yésica Olivera y Abenamar Irrazabal se casaron en el CIC de Médano de Oro hace 6 meses y decidieron este lugar porque les permitió reducir los costos del casamiento y así poder invertir en la casa en la que viven.

“Sacamos cuenta y nos dimos cuenta que si lo hacíamos en el CIC del Médano de Oro nos ahorrábamos mucha plata en combustible. Es que nosotros vivimos cerca del Centro Integrador Comunitario y nuestras familias también, por eso casarnos en otro lugar nos iba a salir más caro”, dijo Yésica.

Además, contó Abenamar, el Registro Civil del CIC les quedó más cómodo ya que al festejo lo habían planeado en la casa.