Tras el operativo realizado en Iglesia el fin de semana pasado, por el que un hombre de Buenos Aires y dos baqueanos sanjuaninos quedaron detenidos al estar envueltos en un presunto robo de piezas arqueológicas, las autoridades locales le pedirán a la Justicia que todo el material patrimonial hallado quede en la provincia. Si bien no definieron cuándo, desde la Subsecretaría de Cultura aseguraron que harán ese planteo para que lo secuestrado no se vaya a Buenos Aires.
Así lo dijo ayer la titular del área, Zulma Invernizzi. Según explicó, el caso está en la Justicia Federal. Lo que queda entonces para Cultura es intentar resguardar las seis puntas de flecha que le secuestraron al hombre, dado que, según las primeras evaluaciones que hicieron y las observaciones de los propios gendarmes que participaron en el operativo, se trataría de piezas que pertenecieron a la cultura Angualasto, comunidad aborigen que se formó en la provincia hace poco más de 1.000 años. Y como Cultura es la autoridad de aplicación en la custodia del patrimonio, tal como establece la ley 25.743, lo que solicitarán es que el Instituto y Museo Mariano Gambier, entidad de la UNSJ que cumplió 45 años el domingo pasado, se convierta en depositario judicial de las piezas mientras dure el proceso.
El pedido será elevado al titular del Segundo Juzgado Federal, Leopoldo Rago Gallo. Fuentes tribunalicias le confirmaron ayer a este diario que la causa ya había llegado a su poder y que incluso ya estaba activada por completo la investigación. Pero no brindaron detalles sobre los pasos a seguir por el juez.
Por lo pronto, ayer seguían detenidos los implicados. Y, según anticiparon miembros del equipo que hizo el operativo (conformado por gente de Gendarmería, la Municipalidad de Iglesia y la Secretaría de Turismo), se espera que la investigación vire hacia el depósito de piezas arqueológicas que el hombre admitió tener en Buenos Aires. Y que es donde presuntamente iban a parar las puntas de flecha que había sacado de la cordillera sanjuanina el viernes pasado, cuando fue sorprendido en su 4×4, con las piezas, herramientas de excavación y hasta un detector de metales.

