De podio. Pertenecen a un equipo chico que este año con la llegada a la dirección técnica de Rubén Ramos (padre) con quien arribaron su hijo Rubén Gabriel, Víctor Arroyo, Sergio Aguirre y Luis Omar Jácamo, decidió salir a plantear lucha. José Luis Irusta había sido tercero en la segunda etapa de la Vuelta de Rawson; Jonathan Soria y el “Polillita”, hicieron segundo y tercero en el circuito Escudero. Ramos fue cuarto en la primera etapa de la Doble Calingasta. En síntesis, sin llegar a ganar se había dado el primer paso: ser protagonistas.
En la fuga de ayer, Ramos se mostró activo al principio hasta sacar la diferencia, después, se limitó a rodar con inteligencia guardando fuerzas para tratar de conseguir lo que logró, cruzar la línea de meta levantando los brazos y dejando libre su pecho donde se lee el nombre de la Asociación que patrocina al conjunto. “Estoy muy feliz, lo veníamos buscando, se trabajó mucho y bien para tener siempre hombres en fuga. Hoy me tocó a mi, pero podría haber ocurrido con cualquiera de los otros compañeros”, dijo quien eternizó su nombre al de la primera victoria del equipo.
