El gobernador bonaerense Daniel Scioli buscará su reelección en las elecciones de hoy, mientras que desde la oposición el candidato de UDESO, Francisco De Narváez, apuesta a darle pelea tras quedar segundo en las internas del pasado 14 de agosto. En tanto, el resto de la oposición, tomando como antecedente el abrumador triunfo del Frente para la Victoria en las primarias, se conforma con incorporar la mayor cantidad de bancas en el Congreso Nacional y la Legislatura provincial y hacer pie en los 135 municipios, base del poder territorial que ejerce el peronismo en esta provincia desde 1987.
Más de 11 millones de bonaerenses -327 mil más que los que figuran en el padrón nacional- se encuentran habilitados para votar el próximo 23 de octubre para gobernador y vice, la mitad de las Cámaras de senadores (23) y de diputados provinciales (46), 135 intendentes, 1.035 concejales y consejeros escolares de los municipios que conforman hoy el mayor distrito del país. Por eso, tanto para el oficialismo como para la oposición, es vital lograr la Gobernación en el mayor distrito electoral del país, que otorgará la llave para controlar el Parlamento nacional y sentará las bases -representa casi el 40% del electorado del país- del escenario político nacional de cara a las elecciones de 2015. Y a diferencia de la elección presidencial, la Gobernación se define por un voto y no existe la instancia del balotaje.
El padrón provincial cuenta con 11.149.170 electores habilitados para votar, en un total de 32.436 mesas mixtas. Supera en 327.165 personas al padrón nacional (10.822.005), porque incluye a ciudadanos extranjeros que podrán elegir solo para cargos provinciales. En esta oportunidad se elegirán 23 senadores provinciales en 4 secciones electorales. Se elegirán 135 intendentes y 1035 concejales, y otros tantos consejeros escolares.
Desde el punto de vista político, los bonaerenses llegan con un triunfo fresco del FpV en las elecciones primarias: la fórmula Daniel Scioli-Gabriel Mariotto se impuso con el 44,13% sobre el 6,18% del intendente de José C. Paz, Jorge Ishi, quienes juntos por el FpV, sumaron el 50,31% de los votos totales en las primarias. Por esto Scioli apuesta ahora a superar ese índice unificando la campaña con los intendentes peronistas y la fórmula encabezada por la presidenta Cristina Fernández-Amado Boudou.
Por su parte, la alianza UCR Unión Celeste y Blanco que resultó segunda en las primarias con De Narváez, busca polarizar con el actual gobernador (obtuvo el 16,72% de los votos el 14 de agosto), y sumar votos del resto del PJ disidente. Y a diferencia de las primarias, De Narváez busca sumar adeptos y por eso cerró un acuerdo informal, además de la alianza con Alfonsin, con el candidato presidencial por Compromiso Federal, Alberto Rodríguez Saá. El entendimiento supone que Rodríguez Saá, al caerse la candidatura de su hermano Adolfo quien obtuvo 5,26%, apoye la postulación de De Narváez. Un dato no menor es que la tercer fuerza para la gobernación en las primarias fue el voto en blanco (12,72%).

