Ya es una constante que siempre se repite. Desamparados crea y crea, va con convicción para adelante, y cuando pone la pelota al piso genera opciones más que claras. Pero siempre se topa con su peor enemigo: no saber concretarlas y desperdiciar chances que luego lamenta como sucedió ayer.
Es que ante Estudiantes fueron 10 oportunidades con una claridad neta, que debían ser goles. Cuatro tuvo José Sánchez, tres Gonzalo Parisi, una Lucas Ceballos, y otra Adrián Benito. Siendo la restante el grito de gol de Parisi a los 24 minutos del complemento. Y Dillon fue claro, "creamos pero no concretamos", y además destacó que "si no los hace Parisi, difícil que sea otro".
Enumerando lo desperdiciado, la primera fue a los 7 minutos tras el centro de Ceballos que el "Pepe" Sánchez definió erróneamente cruzado. A los 20 minutos una de las dos más claras: Parisi la bajó en el área, enganchó y cuando remató al arco con fuerza, la mandó increíblemente afuera. Y 12 minutos después cayó la otra: la hizo Garrido y cuando ingresó al área Parisi se anticipó al ex Peñarol y la punteo para que la pelota se fuese besando el poste. La última de la primera parte quedó en la derecha de Ceballos y su remate de larga distancia que el arquero mandó al tiro de esquina.
Las restante 6 oportunidades llegaron en el complemento. De entrada Benito se animó y Mancinelli voló para sacarla. Sobre los 15 minutos, otra vez Parisi cabeceó abajo y la estirada del 1 triunfó. 2′ después, el cabezazo a quemarropa de Sánchez fue frenado por el arquero cordobés, que ya era figura y la agigantó a los 21′ con el disparó que le contuvo a Sánchez luego que el delantero capturara un rebote.
En la 9na. opción Parisi anotó con un frentazo abajo y la última la tuvo nuevamente Sánchez con una pelota boyando que quedó en el punto penal y la envió afuera.
Muchas opciones que no pudo capitalizar y que marcaron un empate que mereció ser triunfo, de no ser por estar con la mira torcida, una constante en Desamparados.