Para mantener sus propiedades alimentarias y favorecer su conservación es necesario tener algunos cuidados con el pollo.

* Mientras más joven es el pollo es más tierno, menos graso y de piel más fina.

* Para detectar su buen estado hay que examinar la piel. Esta debe tener cierto brillo y ser de color amarillo pálido.

* El pollo fresco se descompone con facilidad. Conviene mantenerlo dentro de su envoltura original hasta el momento de utilizarlo en la cocina.

* El pollo crudo puede conservarse en la heladera por dos o tres días. En el freezer hasta dos meses, preferentemente trozado. Pero no es aconsejable mantenerlo en el frío tanto tiempo porque sus propiedades alimenticias disminuyen.

* El pollo cocido puede guardarse en la heladera por 3 ó 4 días.

* Los menudos se deben conservar por separado y en la heladera. No conviene dejarlos más de un día.

* Nunca hay que descongelar el pollo a temperatura ambiente. La forma indicada es ponerlo en la parte inferior de la heladera.

* Como medida fundamental no se debe obviar el lavado con agua potable antes de cocinarlo.