Si bien pasaron varios meses desde la aprobación de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), sigue generando diferencias entre los profesionales médicos que se oponen. Tiempo atrás, fue la directora del Hospital Marcial Quiroga, Inés Garcés, la que presentó la renuncia en virtud que se oponía a que se implemente. Hoy se hizo oficial la salida de la máxima autoridad del Hospital José Giordano de Albardón, Sonia Sánchez Huerta.

Sánchez Huerta ya tiene reemplazo, se trata de la doctora Luisa Paéz. La salida de la profesional no cayó por sorpresa en Salud Pública de acuerdo a que tiempo atrás lo comunicó, presentó la renuncia y ahora se formalizó el cambio de mando en el nosocomio albardonero.

Vale recordar que los médicos pueden hacer objeción de conciencia, pero el Estado debe garantizar que en cada hospital se pueda acompañar y realizar la práctica abortiva y para ello debe contar con los profesionales que acepten hacerlo. Se complica aún más cuando la cabeza de un nosocomio es quien no quiere saber nada con la aplicación de esta ley.