El monóxido de carbono es el asesino silencioso, que genera dramas cada invierno cuando el frío obliga a calefaccionarse con lo que se pueda, y en muchos casos se recurren a los tradicionales braseros que cuando funcionan en ambientes no ventilados, son un peligro.

Entre el viernes y el domingo, se dieron al menos 16 ingresos al Servicio de Urgencias del Hospital Rawson, muchos de ellos son pacientes menores de edad.

Los últimos casos de intoxicados con monóxido de carbono

En el barrio Landa, en Santa Lucía. Fue ayer en la tarde cuando, cuando una mujer Claudia Mariela Carpio (47) llegó para que sean asistidos a dos nietitos. Una nena de 8 años y su hermanito de 5. Habían estado calentándose con un brasero. Están bien

Este hecho sucedió en calle Virrey Sillero 456 Este, en Rawson, en la tarde del domingo. En este caso ingresó Silvia Alejandra Cruz (31) y una nena de 8 años. El diagnóstico fue con monóxido de carbono de un viejo brasero.

En tanto que el último registrado, pasada la medianoche de este lunes, sucedió en un casa del barrio Angelita, en Santa Lucía, donde Alicia Perla Rodríguez (34) llevó para la atención médica a sus hijitas de 7 y 4 años. También fue con un brasero, según su madre.

Los registrados entre sábado y domingo a primera hora

El primer hecho ocurrió en el interior del Barrio 2 de Abril, de Chimbas. Dos adultos, una adolescente (14) y un nene (7)  tuvieron que ser trasladados de urgencia al Hospital Rawson, donde fueron asistidos. Minutos después ingresó al nosocomio una joven de 21 años oriunda de la Villa Don Arturo, de Santa Lucía, con el mismo cuadro. 

Por otra parte, una situación similar atravesó otra familia, también de Chimbas, luego de que sus hijas terminaran intoxicadas tras inhalar monóxido de carbono, debido a un brasero utilizado para calentarse.

Cerca de las 3, un hombre notó que las menores estaban desvanecidas por lo que de inmediato llamó a una ambulancia, que las trasladó hasta el servicio de Urgencia del Hospital Rawson. Las nenas, de 8 y 4 años de edad, fueron asistidas y dejadas en observación. Esto sucedió en el interior de una vivienda ubicada en la Villa Ariza.

 El viernes, tres hermanos se salvaron de lo peor

Todo sucedió cerca de las 5 del viernes, cuando una mujer despertó y sintió en su cuerpo que algo no estaba bien. De inmediato fue a ver a seis hijos, quienes estaban prácticamente desmayados. Como pudo, logró sacarlos de la vivienda, informaron fuentes del caso.

Vecinos llamaron a una ambulancia que trasladó a los menores de 7, 11 y 17 años hasta el Hospital Rawson, con un cuadro de intoxicación. Al parecer, un brasero colocado para soportar el frío fue el desencadenante de un hecho que afortunadamente no terminó en tragedia.