El conductor del seleccionado jamaiquino Joel McAnuff se llevó el recuerdo más preciado en su despedida de la Copa América: la camiseta de Lionel Messi. Pero el que primereó para quedarse con un souvenir fue el delantero Deshorn Brown, porque el hombre de punta de los Reggae Boyz, tenía un teléfono celular para sacarse una selfie con el astro del fútbol mundial en el medio del campo de juego del estadio Sausalito.
Mientras que desde las tribunas, la gente intentó animarlo a Messi, ya que no hizo un buen partido. Cada vez que fue a patear un córner o tiro libre, recibió el saludo al estilo veneración y un tímido cántico: “Que de la mano, de Lio Messi, todos la vuelta vamos a dar”.
