El “Gato” Sessa fue el que se llevó todas las palmas. El veterano arquero de Gimnasia tuvo mucho trabajo y lo resolvió con eficacia. En el primer tiempo aparte de soportar tres pelotazos en los palos, le tapó sendos remates con aroma de gol a Pavone, primero, y luego Román. En la segunda mitad no estuvo tan apurado como en los primeros 45 minutos, pero cuando lo llamaron a actuar lo hizo con mucha sobriedad. Después de ver cómo se iban desviados un remate de Buenanotte y un cabezado de Roman, le sacó un mano a mano a Pavone y envió al córner un cabezazo de Affranchino. Sobre le final, tirándose a los pies de Funes Mori, cometió un penal que el árbitro no sancionó.
